viernes, 23 de septiembre de 2016

BIENVENIDOS AL ANTROPOCENO: “YA HEMOS CAMBIADO EL CICLO NATURAL DE LA TIERRA”

UN GRUPO CIENTÍFICO ACABA DE CONFIRMAR QUE ESTAMOS EN UNA NUEVA ÉPOCA GEOLÓGICA
JAVIER SALAS

Los isótopos radiactivos depositados en todo el globo tras los ensayos con armas nucleares marcan la entrada en el Antropoceno.

Un grupo designado de especialistas ha decidido que el Antropoceno comienza en 1950 con los residuos radiactivos de las bombas atómicas

Si usted nació antes de 1950, puede que ahora se vaya a sentir algo más mayor: ha vivido en dos épocas geológicas distintas. La Tierra ha entrado en una nueva página del calendario geológico, el Antropoceno. Y una de las pruebas de que el mundo ha cambiado para siempre está en la Ría de Bilbao, en una franja de siete metros de sedimentos acumulados por la industrialización. El grupo de científicos encargados de tomar esta decisión acaba de votar que ya hemos superado el Holoceno. La huella de la actividad humana quedará para siempre grabada en todo el planeta como una línea bien identificable en los estratos que se verán dentro de miles o millones de años en cuevas y acantilados, una referencia permanente para los científicos del futuro.
"Ya hemos cambiado la Tierra: el Antropoceno es el momento en que los humanos conseguimos cambiar el ciclo vital del planeta, cuando los humanos sacamos al planeta de su variabilidad natural", explica Alejandro Cearreta, el único científico español que formaba parte del equipo de alto nivel que tenía como misión determinar si de verdad vivimos ya en un momento geológico distinto, en una capa de crema bien definida en el milhojas de los estratos terrestres.
Este grupo de 35 especialistas, tras siete años de trabajos, realizó varias votaciones hasta decidir que el Antropoceno es ya una nueva época geológica dentro del periodo Cuaternario (el Jurásico, por ejemplo, es otro periodo geológico dividido en distintas épocas). También votaron que la marca que determina ese cambio son los residuos radiactivos del plutonio, tras los numerosos ensayos con bombas atómicas realizados a mediados del siglo XX. Y por eso la fecha que eligieron como línea de entrada en el Antropoceno es 1950. "Aunque 1952 sería más concreto, porque es cuando todos los isótopos radiactivos provocados por esas bombas se asentaron en todo el planeta", matiza Cearreta, profesor de la Universidad del País Vasco.
Para entrar en un momento geológico distinto, explica el geólogo vasco, tiene que haber una señal inequívoca "global y sincrónica" del cambio planetario. Por eso, aunque inicialmente se propuso 1800 como fecha de inicio del Antropoceno, con la Revolución Industrial, se ha descartado porque su huella no llega por igual y al mismo tiempo a todo el globo.
Pero lo importante para determinar un cambio geológico no es que los humanos hayamos dejado huella. Esa muesca humana ya se nota desde hace miles de años. La clave es que se trata de un cambio de ciclo en el comportamiento del planeta entero, provocado por los humanos y sus plásticos, sus emisiones de gases, los desechos de sus industrias, la alteración de ecosistemas, la desaparición masiva de biodiversidad, la acidificación de los mares... "Muchos de estos cambios son geológicamente de larga duración, y algunos son irreversibles", asegura el grupo en su resolución. No es un juicio político, como se le ha reprochado a este grupo: "Es un hecho científico, se está acumulando un registro geológico. La evidencia del Antropoceno va a durar para siempre", zanja Cearreta.
Y eso es al margen de que sea un concepto científico con repercusiones políticas, como también sucede con el cambio climático, explica este científico, que sí opina que la llegada del Antropoceno es una prueba de "nuestro fracaso como sociedad". "¿Es bueno o es malo que se extinguieran los dinosaurios? No entramos a juzgarlo, pero ahora se ha producido un cambio claro en el Sistema Tierra", asegura este científico, que reconoce que vivieron una presión extraordinaria para su campo durante la votación, en el Congreso Internacional de Geología celebrado en Sudáfrica: "Nos desborda un poco, no estamos acostumbrados a generar este interés".

"¿Es bueno o malo que se extinguieran los dinosaurios? No juzgamos, se ha producido un cambio claro en el Sistema Tierra", asegura
En cualquier caso, la decisión del grupo de especialistas todavía no aparecerá en los libros de texto, ya que aún la tienen que ratificar formalmente en los próximos años varios organismos. Cearreta bromea reconociendo que las decisiones en su campo se toman a ritmos geológicos: hasta 2009 no se delimitó formalmente el Cuaternario, que arrancó hace dos millones y medio de años. Y todavía falta identificar lo que llaman el clavo dorado, un lugar, una señal en la tierra que sirva de lugar de referencia para señalar el comienzo de ese nuevo capítulo de la geología para todo el mundo.
Cearreta propone una franja de siete metros que se puede ver claramente en la playa de Tunelboca, en la Ría de Bilbao, donde se fueron acumulando sedimentos durante un siglo de escorias vertidas por los altos hornos. "El oleaje y las corrientes marinas los han ido transportando y acumulando desde los años 1940 como una playa cementada al pie de los acantilados de Getxo", indica el geólogo, que reconoce que habrá politiqueo en la elección de ese referente mundial de la entrada de la humanidad en una nueva era. Será en unos años; para los geólogos no hay prisa: "Somos lentos para actuar, nuestra unidad de tiempo es el millón de años".

domingo, 24 de julio de 2016

El Palacio Real de Valencia es el gran olvidado de la ciudad de Valencia.

Haremos un pequeños recorrido por la historia de “El Palacio del Real de Valencia” (s. XI a XIX), hablaremos de su nacimiento, su utilización, sus transformaciones, su desaparición y casi olvido.
Desde sus inicios aproximadamente en el s. XI el edificio fue concebido como una residencia real, se trataba de la residencia de real de los monarcas de la dinastía Amirí reyes de la Taifa de Balansiya – Valencia, anteriormente era una finca de recreo del Califato de Córdoba.
En 1238 y tras cinco meses de sitio el rey de Aragón Jaume I conquista la Ciudad de Valencia y  los territorios de Sarq Al-Andalus, el Palacio Real se reconstruyo y remodeló para convertirse en la residencia oficial de los monarcas de la Corona de Aragón y del Reino de Valencia, más tarde paso a utilizarse como residencia de los monarcas de la casa de los Austrias en sus visitas a la ciudad, pero en su época Borbónica, se inicia su decadencia, pasando a utilizarse como residencia de los capitanes generales.
Para entender mejor el pasado de la ciudad, deberíamos conocer con más profundidad esta joya arquitectónica, ya que estamos ante uno de los edificios más importantes y emblemáticos de cuantos se hayan construido en la ciudad, aunque lo más lamentable es que estamos ante el único edificio de estas características que fue totalmente arrasado por una más que dudosa decisión político-militar, de la autoridad Borbónica, durante la llamada guerra contra el francés o de la Independencia (1810), su demolición y la poca información de que se dispone, son los motivos por los que nos encontramos posiblemente ante el edificio menos conocido por la mayoría de los valencianos.

Pero gracias al descubrimiento de los planos realizados en el 1802 y que estaban depositados en el archivo de París y de otros documentos de la época, podemos conocer y afirmar que el Palacio del Real era un magnífico edificio de grandes dimensiones.
Según se desprenden de los estudios realizados podemos afirmar que el Palacio Real se componía de dos cuerpos, denominados el palacio viejo, que integraba en su interior la antigua almoina musulmana y el palacio nuevo edificio de nueva planta, los dos palacios que formaban un único edificio estaban flanqueada por diversas torres que le daban más majestuosidad y a la vez servían de elementos defensivos.
El edificio del palacio viejo giraba alrededor de un patio, albergaba una capilla y disponía de cuatro torres, se utilizaba como dependencias de uso exclusivo de la reina.
El palacio nuevo giraba alrededor de dos patios, albergaba otra capilla, las dependencias del Rey se encontraban en la torre principal o Torre de los Ángeles, además estaban los salones que loa monarcas utilizaban para las audiencias, las fiestas o las recepciones según las épocas.
Aunque en el año 1986 con motivo de unas obras en la Calle General Elio vieron la luz algunos restos de este magnífico edificio, las autoridades del momento decidieron que era mejor para la ciudad una buena capa de asfalto, que su HISTORIA y se procedió a tapar los restos, entre otros este es el motivo de que solo encontremos algunos restos arqueológicos del Palacio Real en el Museo de Historia de la Ciudad (Valencia), la realidad aun que no pueda entenderlo es que estos restos están semiocultos y mal catalogados.
Por suerte de su época de esplendor conservamos algunos vestigios y denominaciones como:
  • El Puente del Real o de viveros, puente sobre el río que comunicaba la ciudad con el palacio.
  • El Llano del Real, plaza que se encontraba frente a la fachada
  • Los Jardines del Real y Viveros que formaban parte de los jardines del propio palacio.

El reinado de Alfonso el Magnánimo (1416-1458) lo podemos considerar el de mayor  auge y la época más dorada del Palacio Real de Valencia. El Monarca se decidió a consolidar el edificio como residencia real, y para ello quiso contar con los mejores artistas valencianos para llevar a cabo sus propuestas, algunas de las cuales pudo seguir de cerca coincidiendo con sus años de residencia en Valencia. Así invertiría considerables sumas de dinero, siguiendo personalmente el desarrollo de las obras, para hacer del Real valenciano una de las residencias más significativas de sus reinos por delante de otras residencias de la Corona de Aragón.
La desaparición del Palacio Real se encuadra dentro del contexto de la guerra contra las tropas Napoleónicas, el 12 de marzo de 1810 y contrariamente a lo que la mayor parte de la gente pueda pensar, la demolición del Palacio no fue obra de las tropas de Napoleón que sitiaron la ciudad.
Se trató supuéstamente de una discutible decisión militar, fueron las tropas españolas que siguiendo las órdenes del general Blake, llevaron a cabo su demolición, supuéstamente se pretendía evitar que el palacio que se encontraba fuera de las murallas de la ciudad  pudiera convertirse en una plaza desde donde hostigar la ciudad durante se sitio y posible asalto.
Lo cierto es que a los Borbones les vino “como anillo al dedo” esa decisión, ya que de esta forma desaparecía uno de los vestigios más emblemáticos del antiguo Reino de Valencia.
Recuperar el Palacio Real de Valencia es imposible, pero que deje de ser el gran olvidado de la ciudad, es algo que debemos conseguir, dando mayor difusión a los hallazgos y estudios que se están realizando sobre este magnífico edificio que nuestros antepasado destruyeron.

domingo, 24 de abril de 2016

EL NEOLÍTICO AL PAIS VALENCIA

El País Valencia presenta gran cantidad de yacimientos neolíticos.

Castellón
  • Cova del Polvorí (Pobla de Benifassà)
  • Cova Fosca (Ares del Maestrat)
  • Racó de Nando (Benassal)
  • Coves de la Saltadora (Coves de Vinromà)

Valencia
  • Cinto de la Ventana (Dos Aguas)
  • Cueva de la Cocina (Dos Aguas)
  • Ereta del Pedregal (Navarres)
  • Cova de la Sarsa (Bocairent)

Alicante
  • Cova de l’Or (Beniarrés)
  • Cova d’ En Pardo (Planes)
  • Niuet (L’Alqueria d’Aznar)
  • Les Jovades (Cocentaina)
  • Pla de Petracos (Castell de Castells)
  • Cova de les Cendres (Teulada-Moraira)
  • Casa de Lara (Villena)
  • La Macolla (Villena)
MAPA

El mayor número de asentamientos de este periodo, se localizan en la zona comprendida entre el sur de la provincia de Valencia y el norte de Alicante.

Los yacimientos arqueológicos más relevantes son en la actualidad en Castellón “La Cova Fosca” en Ares del Maestrat, en Valencia “La Cueva de las Cocinas” en Dos Aguas y en Alicante  “La Cova de l’ Or” en Beniarres.


DATACIÓN
El Neolítico en el País Valencia abarca el espacio comprendido entre el 5.600 aC cal. hasta el 3150 aC cal.


LA COVA FOSCA (Ares del Maestrat, Castellón)
Ubicación:
  • El yacimiento que se encuentra situado en la vertiente sur de la montaña, que se introduce entre el Barranco dels Cirerals y el Barranco Molero, a 900 msnm.
Excavaciones:
  • Francesc Gusi (1975-1982)
  • Carme Olària i Punyoles (UJI), (1999-2000)

Estratigrafía:
  • Neolítico Antiguo
    • Corresponde a los estratos que se identifican como niveles Fosca II y I

LA CUEVA DE LA COCINA (Dos Aguas, Valencia)
Ubicación:

  • El yacimiento que se encuentra situado en el margen derecho del barranco de Cinto Ventanas a 400 msnm.
Excavaciones:
  • Lluís Pericot García  1945
  • Francisco J. Fortea 1973 y 1987

Estratigrafía:
  • Neolítico Antiguo
    • Corresponde a los estratos inferiores (5-3) que se identifican como niveles Cocina III
  • Neolítico Reciente
    • Corresponde a los estratos superiores que se identifican como Cocina IV.

LA COVA DE L'OR (Beniarres, Alicante)
Ubicación:
  • El yacimiento que se encuentra situado en la Serra de Benicadell a 650 msnm. Está compuesto por una planta alargada de 24x8 metres.


Excavaciones:
  • Rafael Pardo Ballester, 1933 y 1936
  • Bernard Marti i Oliver, 1967 y 1968

Estratigrafía:
  • Neolítico Reciente
    • Corresponde a los estratos VI y V donde se han localizado fragmentos de cerámica cardial fechados en el 2º cuarto del V milenio aC.
  • Neolítico Medio
    • Estratos IV y III a partir de finales del V milenio aC. con cerámicas cardiales e incisas.
  • Neolítico Antiguo
    • Estratos II y I caracterizados por cerámicas lisas, de relieves, acanaladas y peinadas. Realmente, estos estratos debemos enmarcarlos en un horizonte de transición y más bien Calcolítico. 



BIBLIOGRAFIA:
Martí Oliver, Bernat, Arqueología del Pais Valenciano: Panorama y perspectivas, Secretariado de Publicaciones Universidad de Alicante, Alcoy 1985
Martí Oliver, Bernat y otros, Cova de l’Or (Beniarres-Alicante) Vol. II, Servicio de investigación Prehistórica, Diputación Provincial de Valencia, serie de trabajos varios nº 65, Valencia, 1980
Fortea Pérez, Javier, La cueva de la Cocina, ensayo de de cronología del epipaleolítico, Servicio de investigación Prehistórica, serie de trabajos varios nº 40, Diputación Provincial de Valencia, Valencia 1971
Pericot García, Luis, La cueva de la Cocina, Servicio de investigación Prehistórica, serie de trabajos, Diputación Provincial de Valencia, Valencia 1989

Pascual Benito, Josep LLuís, Utillaje óseo, adornos e ídolos neolíticos valencianos, Servicio de investigación Prehistórica, serie de trabajos varios nº 95, Diputación Provincial de Valencia, Valencia 1998